Desembocadura natural del Río Guadalete, es hoy, tras la incomunicación realizada por el IRYDA para la desecación de las marismas a principio de los años 60 del pasado siglo, un brazo de mar sujeto a las subidas y bajadas de las mareas.
Tiene una profundidad de 2 a 4 metros y es de destacar su función de riego a la Península de Los Toruños, zona húmeda de 773 Ha. que ha permanecido aislada de la actividad humana.
Es un punto de cría de numerosas especies de peces como la dorada, sargo, mojarra. Moluscos como las almejas y coquinas. Crustáceos como el cangrejo moro, la coñeta y el barrilete o cangrejo violinista y cefalópodos como el choco.
En sus orillas también pueden observarse la presencia de aves que buscan su alimento en el fango como el vuelvepiedras, correlimos, archibebe, gaviotas etc.